miércoles, 9 de enero de 2019

Preparándonos para El Niño


Cada cierto tiempo las aguas de nuestro mar se calientan inusualmente hacia el norte, generando un serio impacto meteorológico: el cielo se cubre de espesas nubes que se convierten en copiosas precipitaciones que ensanchan el caudal de los ríos hasta desbordarlos y hacerlos arrasar todo lo que encuentran a su paso.
La zona más expuesta es la franja costera, en la parte baja de las cuencas, donde los desbordes inundan campos de cultivo, centros poblados y ciudades, bloqueando carreteras, trayendo abajo puentes, aislando a las personas, destruyendo sus medios de vida e interrumpiendo su vida cotidiana.

Reconstrucción
La mejor manera de afrontar la devastación es previniéndola. Así lo ha entendido el Estado que promueve un conjunto de inversiones en infraestructura a través del programa Reconstrucción con Cambios que trabaja desde un enfoque de gestión integral de cuencas (de nada sirve proteger y atender “abajo”, si no se hace nada en las zonas altas de las cuencas). Si bien, este programa apunta a reducir impactos, poco se avanzará sin la participación de las personas, agentes claves de toda política integral de gestión de riesgos.

Movilización
Plan Internacional viene llevando a cabo diferentes acciones para desarrollar actitudes y competencias para actuar frente al riesgo. Un equipo de facilitadores visita diariamente escuelas, comunidades e instituciones verificando como éstas vienen planificando y ejecutando acciones de prevención. Es edificante comprobar que muchos directores y docentes, junto a estudiantes y padres de familia, van asumiendo poco a poco sus responsabilidades. Los simulacros en la escuela son escenarios propicios para fortalecer y ensayar una serie de competencias frente a los desastres. A nivel comunitario, se han formado brigadas y equipos de voluntariado que promueven la señalización de zonas seguras, la distribución de roles y funciones y la identificación de grupos vulnerables de la población (niños, ancianos y discapacitados).

Comunicación
Para que un proyecto como éste genere cambios duraderos en las actitudes y comportamientos, debe sostenerse en una estrategia integral de comunicación que aproveche los medios locales y se atreva a innovar con nuevos dispositivos que ayuden a poner en acción a las personas. Para este propósito he visitado, junto a Rubens Camposano, las localidades de la Arena y Tambogrande, en Piura, donde hemos llevado a cabo entrevistas, focus groups y talleres, buscando identificar alternativas para potenciar el componente comunicacional de este tipo de intervenciones.


martes, 10 de enero de 2017

Hacia una Cultura de la Calidad

Junto a directivos del Instituto La Salle, en Urubamba.
(Abajo:Con estudiantes del Instituto Público Juliaca)
El año 2016 tuve la oportunidad de conocer y sistematizar la experiencia de acreditación de seis institutos educativos del país. La acreditación ha dejado en ellos interesantes lecciones y promovido la instalación de buenas prácticas pedagógicas y de gestión administrativa. 
Como sabemos, la acreditación es fundamental para asegurar la calidad de la educación. En nuestro país, el órgano encargado de este proceso a nivel nacional es el SINEACE que desde el año 2009 viene acreditando escuelas, universidades e institutos pedagógicos y tecnológicos.
Nuestro estudio constató que las instituciones acreditadas realizaban actividades orientadas a la mejora de la calidad desde mucho tiempo antes de iniciar su proceso de acreditación. Estas "buenas prácticas” se soportaban en el liderazgo de algunas personas, pero luego de la acreditación se convirtieron en procesos institucionales.
La perspectiva de acreditación estuvo motivada por la posibilidad de consolidar el prestigio institucional y el imperativo de las instituciones de considerarse referentes de la educación en sus regiones (Cuzco, Puno, Tacna, Ica). Muchos de sus directivos manifestaron la necesidad de “marcar la diferencia” en un escenario regional donde prolifera la oferta educativa de dudosa calidad.
El proceso de acreditación ha supuesto en estas instituciones una transformación organizacional, llevándolas más allá del mero cumplimiento. Les ha permitido retomar y potenciar algunas prácticas, valorando sus progresos en calidad al identificar a qué dimensión de acreditación pertenece cada actividad y reconociendo su nivel de cumplimiento. La matriz de acreditación fue un instrumento clave para superar la apreciación subjetiva de la calidad permitiendo a los institutos conocer avances y brechas en las dimensiones y factores de acreditación.
Un aprendizaje importante se ha dado en torno de la concepción de la evidencia, superando su dimensión documentaria para constituirse en un medio de verificación del logro de indicadores. Así, las instituciones pudieron transitar de gestiones por objetivos y actividades a una gestión por resultado, donde los indicadores son elementos clave para la evaluación de impacto.
El proceso además hizo posible importantes innovaciones pedagógicas (en aula, módulos de autoaprendizaje, portafolio, enfoques pedagógicos, evaluación, alineamiento curricular) así como interesantes experiencias en investigación y gestión de prácticas pre profesionales.
En el siguiente link PRESENTACIÓN CONGRESO se puede ver la presentación pública de la investigación (minuto 1:55:20). En este link: Hacia Una Cultura de la Calidad podrás descargar el libro.

LIBRO: Aprendiendo en Salud, 2016

La anemia, la obesidad, las infecciones gastrointestinales y la parasitosis son todavía problemáticas de salud extendidas entre la población de niño(a)s de Chincha y Pisco. Estos trastornos no solo complican la vida y la salud, afectan también su desarrollo académico, su socialización, comprometiendo su futuro.

Una de las lecciones aprendidas de la experiencia es el impacto que genera en la salud, el abordaje en aula de aspectos esenciales de higiene, actividad física, consumo de agua y nutrición.

Hábitos tan sencillos como ingerir agua segura o lavarse las manos en momentos críticos (antes de comer y después de ir al baño) previenen de manera efectiva las infecciones gastrointestinales. De otra parte, la modificación de las loncheras (eliminando gaseosas y snacks) y la incorporación de actividad física, tienen un visible impacto en el peso, la salud y el desarrollo de lo(a)s niño(a)s.

Para modificar estos estilos de vida se han movilizado docentes, comunidades y familias. El impacto que se logra a partir de estos cambios concretos es inimaginable.

El libro Aprendiendo en Salud capitaliza una interesante experiencia educativa llevada a cabo por Socios en Salud (Partners In Health filial Perú) y Warma Pura en escuelas de Chincha y Pisco. Conozcamos la experiencia, identificando las estrategias desplegadas y las historias de vida de quienes la han hecho posible.

Para descargar la publicación ir al siguiente enlace: Libro Aprendiendo En Salud

FICHA TÉCNICA
Cabrera José y Chalco Rosa. (2016). Aprendiendo en Salud, una experiencia de educación en salud en las escuelas de Chincha y Pisco. Lima: Socios en Salud.

miércoles, 31 de agosto de 2011

La reconstrucción (una reflexión a 4 años del Sismo de ICA)

Daniele Ingratoci, psicólogo social

Intervención de ASPEm - Ayuda en Acción luego del sismo
Han pasado 4 años desde cuando el terremoto del 15 de agosto arraso con las provincias de Chincha y Pisco y volvió de actualidad en la opinión pública peruana términos como damnificados, emergencia, reconstrucción. A distancia de tanto tiempo es el momento de hacer un balance de la intervención post-desastre del gobierno e identificar los posibles puntos críticos.

La intervención del gobierno para la reconstrucción se plasmo a través de la creación de un organismo llamado Fondo para la Reconstrucción integral de las zonas afectadas por el terremoto del 15 de agosto (FORSUR). Desde su creación por Ley N° 29078 este organismo tenía el objetivo de “lograr acciones de rehabilitación, construcción y reconstrucción de las zonas afectadas ”, teniendo inicialmente a su cargo “la aprobación de proyectos, programas y actividades” así como su “monitoreo, seguimiento y evaluación”. Desde el comienzo, esta entidad manifestó que las unidades ejecutoras de los proyectos eran los gobiernos regionales, provinciales y distritales, así como las empresas prestadoras de servicio; el rol de Forsur exigía entonces la capacidad de concertar entre los actores sociales y aprovechar las sinergias para devolver a los damnificados reunidos en los albergues un nivel digno de vida en viviendas sismo compatibles; sin embargo es interesante el hecho que después de dos anos, mediante decreto supremo N. 059-2009 se aprobó la reestructuración del FORSUR, designando un presidente ejecutivo y añadiendo entre sus actividades la implementación de los proyectos, programas y actividades de construcción y reconstrucción como fuera una unidad ejecutora.

jueves, 19 de mayo de 2011

Jóvenes y Política

Organicé un evento que se llevó a cabo en la Universidad Científica del Sur y me correspondió, dentro del programa, hacer la presentación ante nuestros tres disertadores: jóvenes candidatos al Congreso de la República 2011. Ellos fueron Maali del Pomar, Augusto Rey y Sergio Tejada.

Héctor Huerto y Augusto Rey en Foro Juventud y Política

Mis palabras fueron más o menos éstas:

No quiero dejar pasar la oportunidad para reflexionar sobre algunos aspectos que, desde mi perspectiva de docente e investigador de los mundos juveniles, considero son claves para entender esto de la política y los jóvenes o de los jóvenes y la política, como queramos enfatizarlo.

El título del evento, como hemos podido darnos cuenta, fusiona dos categorías: juventud y política. Quizás en otros momentos y lugares se haya o se esté hablando de política solamente, pero aquí hemos decidido hablar de jóvenes y política. ¿Por qué lo hemos decido? ¿Por qué en un país donde los actores políticos deben ser reconocidos por sus idearios o propuestas programáticas, nos interesa tanto su condición juvenil?

Intentaré responder esta pregunta en breves, muy breves minutos, para pasar a escuchar a quienes hemos venido a escuchar: nuestros actores políticos, que, por añadidura, son personas jóvenes.

Es recientemente que en el Perú se empieza hacer esta separación generacional de los actores políticos. Anteriormente esto no sucedía. Al menos no, con el énfasis de ahora. Por ejemplo, en una investigación que viene realizando Héctor Huerto, profesor de nuestra Universidad, se ha identificado que en la Asamblea Constituyente de 1978 participaron políticos jóvenes, pero era más notoria su condición ideológica que su propia condición juvenil. Por ejemplo, Javier Diez Canseco, actual congresista electo por Gana Perú, participó en dicha asamblea constituyente y no se visibilizó su condición juvenil, sino más bien su condición ideológica de izquierda. ¿Por qué?

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viernes, 4 de febrero de 2011

Jóvenes y país, los retos de una nueva psicología

Fui invitado recientemente a brindar una charla a jóvenes interesados en estudiar psicología. Quise aprovechar el breve espacio que tenía para plantearles algunas ideas sobre los jóvenes, la psicología, sin perder la valiosa oportunidad de emparentar mi propuesta con las necesidades de desarrollo del país. Una psicología que apunte a superar los problemas y aprovechar las oportunidades, en el marco de un proyecto colectivo es el reto que tenemos los psicólogos peruanos. De esto trató mi breve charla que reproduzco ahora con algunas incorporaciones adicionales. Vale confesar que gobierna el texto la visión obtenida durante una década de experiencia como psicólogo social.

Colectivo Sin Normas en Encuentro de Asociación Atocongo

Sobre la situación de los jóvenes

Cuando me comentaron que realizaría esta exposición, inmediatamente pensé en el motivo de los chicos y chicas que asistirían. Individuos que tomarán una decisión vocacional, una de las decisiones más trascendentales de la vida, que afectará - a estas alturas de su vida - irremediablemente su futuro y determinará para siempre sus estilos de vida.

Y ya que el auditorio es de jóvenes inicio mi ponencia deteniéndome en el fenómeno de la juventud y sus procesos. ¿Saben ustedes que en el mundo existen más de 1,500 millones de jóvenes? Cuando pensamos el mundo en términos demográficos llegamos a algunas constataciones: por ejemplo, el 86% de esos jóvenes vive en los países considerados en vías de desarrollo. Pero no basta describir la distribución poblacional del mundo en que vivimos. Los psicólogos debemos explicar los fenómenos. ¿Por qué la mayoría de jóvenes habitan las ciudades y tugurios del Sur? Es obvio que la respuesta nos podría llevar por senderos ideológicos que quiero evitar para analizar otros fenómenos que se esconden detrás de estas realidades. (dar clik abajo para seguir leyendo)

martes, 2 de noviembre de 2010

Psicología Social y Prejuicios

José Luis Cabrera
Naturaleza del prejuicio
Aunque es bien sabido que los prejuicios afectan negativamente a ciertos grupos de personas en virtud de determinadas características que configuran ciertos estereotipos sociales; también es cierto que tienen un efecto positivo pues suelen reafirmar, por ejemplo, sentimientos de identidad al interior de los grupos (Worchel, 2002). Allport fue uno de los primeros psicólogos sociales en abordar el prejuicio (La Naturaleza del Prejuicio, 1954) identificando factores cognoscitivos y culturales que intervienen en su formación.


De manera práctica, podemos definir el prejuicio como un juicio previo negativo sobre un grupo y sus miembros (Myers, 2005). Pues bien, cuando actuamos prejuiciosamente, solemos asignarle a determinados grupos algunos atributos negativos; de hecho, este es el efecto social más notorio de los prejuicios. Es por ello que muchas veces los prejuicios son abordados desde una perspectiva reivindicatoria (cuando el que lo hace pertenece a alguna minoría afectada) o solidaria (cuando el que lo hace apela a los derechos humanos de quienes son sus víctimas). Pero debemos reconocer que a veces los prejuicios le asignan ciertos atributos positivos a algunos grupos sociales (en muchos sectores de la sociedad limeña, por ejemplo, la decencia está asociada al color de la piel ).

Siempre me refiero en clases a la situación que viví en un hospital limeño hace ya buenos años y que aún recuerdo mucho. Un grupo de “pacientes” ocupábamos la sala de espera de los servicios de otorrinolaringología para ser atendidos por algún médico de turno. Cuando salió la enfermera, nos presentó una lista con el apellido de tres doctores. Nosotros teníamos que elegir el médico que finalmente nos atendería. Pero, ¿cómo elegir a uno de los médicos si sólo sabíamos de ellos, sus apellidos? No había ninguna referencia más. Mientras todos dudábamos viendo la lista, indecisos, una de las personas del grupo resueltamente dijo en voz alta: yo voy a ser atendido por el doctor Simabukuro (no recuerdo bien, pero el apellido era japonés y sonaba parecido). Interesado en la actitud resuelta de este señor, le pregunté si conocía a ese tal Simabukuro y si lo consideraba un buen médico, a lo que él me respondió, dejándome perplejo: no lo conozco pero... ¿es japonés, no? Los japoneses son estudiosos y serios.

No es necesario terminar de narrar el desenlace para imaginar lo que pasó: inmediatamente todas las personas del grupo siguieron la decisión de nuestro “amigo” y terminaron saturando la jornada de trabajo del tal Shimabukuro, dejando al resto de médicos con algún tiempo libre para la mañana.

Creo que este podría ser un caso explícito de prejuicio en sentido positivo. Ojo, digo sentido positivo, no consecuencias positivas, ya que probablemente la decisión de la mayoría no fue la acertada, pues terminaron saturando un servicio, desperdiciando las posibilidades de conocer la experiencia de los otros médicos y en suma, arriesgándose tras una información que nada tenía que ver con la performance del médico en mención.

Prejuicio y estereotipo

¿Por qué evaluamos a los demás de forma positiva o negativa sin siquiera conocerlos? ¿Cómo se construyen los estereotipos que finalmente devienen en prejuicios hacia determinados grupos sociales? Para responder estas preguntas primero debemos aclarar que la naturaleza de los estereotipos es cognitiva, pues éstos aluden a creencias construidas a partir de información extraída, procesada y consolidada en una fuente prioritariamente cognitiva. Los estereotipos son convicciones, dice Worchel. Los prejuicios, en cambio, son actitudes y como tales se forman a partir de tres tipos de información: cognitiva, emocional y conductual (Myers, 2005).

viernes, 3 de septiembre de 2010

¿Tarea de todos?

Reflexiones en torno a pobreza y sociedad
Niños caminando a la escuela, Huancavelica
 
Afuera nos espera el vehículo con el que nos trasladaremos al interior del país.
 
Nos aguardan cerca de 9 horas de viaje. Nuestro destino es Lircay, distrito de Angaraes, Provincia de Huancavelica. El automóvil pronto dejará la Capital, penetrará centros poblados y sorteará las innumerables curvas que bordean los precipicios de nuestro Perú profundo. Aunque hemos viajado muchas veces, esta vez nos inquieta un dato: Huancavelica es el departamento más pobre del Perú. Esto suscita algunas reflexiones.
 
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Sobre la pobreza
 
En el Perú 35 de cada 100 peruanos son pobres, según el Informe de Pobreza 2009 (INEI, 2010). Esta cifra es significativa si consideramos que, según la definición de pobreza utilizada en este informe, este 34,8% de peruanos no alcanza el nivel de ingresos suficiente para satisfacer sus necesidades básicas. La cifra disminuye, pero se hace más dramática, si nos fijamos en aquellos que no cubren siquiera las necesidades alimentarias que su organismo demanda para llevar una vida normal: 11,5 por ciento de peruanos literalmente, no tiene qué comer, son pobres extremos, según este informe oficial.
 
Desplegadas estas cifras sobre una línea temporal, aparentan ser auspiciosas, y lo son más para un gobierno que, próximo al retiro, pretende evidenciar a toda costa los logros de su lucha contra la pobreza. Y es que la curva de pobreza ha ido descendiendo a límites que, aunque todavía severos, proyectan una ilusión de progreso: hemos pasado del 56% a un 34,8% de pobres en apenas 6 años y las cifras siguen viniéndose abajo.
 
Es cierto que estas cifras son prometedoras, pero no deberíamos celebrarlas hasta el punto de mostrar tolerancia con los todavía severos porcentajes de pobreza que convive entre nosotros. En nuestro país muchos fenómenos son presentados como naturales. Por ello tendemos a aceptar como un principio absoluto la existencia de pobres como requisito básico de funcionamiento del sistema. Esta naturalización de la pobreza es perniciosa, casi tanto como aquella que permite la violencia de los hombres hacia las mujeres, tema en el que si bien se han dado logros evidentes (en muchos sectores sociales ya no se acepta este tipo de violencia), todavía se necesitan pasos definitivos para desterrarla.
 
¿Por qué seguimos tolerando la pobreza? Quizás por que en nuestro país ésta así como ancha, es a la vez ajena. Ajena a una clase política que no ha enderezado su comportamiento histórico (corrupción, clientelismo, incapacidad); ajena a cierto sector de empresarios que todavía no entiende que inversión en el mundo moderno es también sinónimo de responsabilidad; ajena, en suma, a muchos sectores sociales que no comprenden que las posibilidades de convivencia dependen de condiciones irrestrictas de equidad.
 
 

martes, 3 de agosto de 2010

¿Imaginación psicosocial?

Niños recicladores en Talara
Por José Luis Cabrera

La imaginación sociológica es la capacidad de usar la imaginación para analizar diversos fenómenos sociales situándolos en amplios contextos. Para Anthony Giddens aprender a pensar sociológicamente implica cultivar la imaginación (Giddens, 1989).

Este uso de la imaginación, sin embargo, no es privativo de la sociología. Los psicólogos también tenemos que imaginar constantemente, tanto para entender, como plantear alternativas a las diferentes problemáticas que aborda nuestra disciplina.

Por ello he tomado prestado este concepto (acuñado por Wright Mills en 1970) y lo he trasladado a nuestro campo de investigación y acción. Usar nuestra imaginación supone un ejercicio de inspiración necesario para entender las situaciones, concebir propuestas y plantear alternativas a los problemas que abordamos.


¿Pero cómo funciona este tipo de imaginación? ¿Es posible aprender a utilizarla? ¿Es susceptible de enseñarse? No lo sé. Pero creo sinceramente que todos tenemos la suficiente dosis de ingenio para plantear propuestas a los fenómenos que a diario enfrentamos en nuestro quehacer profesional e incluso, en nuestra propia cotidianeidad.

Hace unos años fui contratado por una empresa petrolera para evaluar una situación de conflicto social emergente y plantear alternativas ante los problemas suscitados. A partir de un primer contacto con la zona de trabajo elaboré un diagnóstico aproximativo y esbocé algunas líneas de acción para una propuesta de intervención integral desde la empresa privada. Lo que vino después fue el diseño técnico de un proyecto, pero ese no es el tema del presente post. Para redactar el informe, que debía incluir lineamientos de acción, hice un gran esfuerzo de imaginación. Dejo aquí aquel texto, como testimonio que ejemplifica el tema abordado en este post.